Arranca el curso de la LOMCE: el mayor ataque a la igualdad social y de género

CCOO. -La LOMCE ya está en marcha, impuesta por el gobierno en nuestros centros escolares, en nuestras vidas. Con la LOMCE quieren imponer una escuela de desigualdad. En términos docentes, de educación para la igualdad entre mujeres y hombres, respeto a la diversidad y prevención de violencia de género, entre otros, significa un retroceso ideológico. Y los aspectos sociales y económicos que conlleva, como el encarecimiento de tasas, el endurecimiento de becas y la pérdida de servicios públicos educativos, agiganta las barreras de acceso a las personas con menos recursos, con nefasto impacto de género.
15 de septiembre de 2014

Mientras en el Plan Estratégico para la igualdad de oportunidades 2014-2016 (PEIO), el gobierno reconoce que la educación en igualdad es el eje fundamental para generar una sociedad libre de desigualdad, de discriminación y de violencia contra las mujeres, no duda en poner en marcha una ley retrógrada, restrictiva, antisocial, que alimenta material y simbólicamente la desigualdad y la inequidad. Con la LOMCE perdemos igualdad de oportunidades, enseñanza pública de calidad, perdemos empleos y perdemos servicios de conciliación. De nuevo, las mujeres perdemos doblemente.

Ignorando la participación de la comunidad educativa, la LOMCE impone un modelo educativo ultraconservador, que erosiona los principios educativos de una sociedad democrática y laica y que  es incompatible con el derecho a la igualdad efectiva de mujeres y hombres que establece la Ley Orgánica de Igualdad. Elimina la educación en valores democráticos como eje transversal del currículo educativo, a la vez que privilegia la asignatura de Religión, a la que dota de valor académico, a  sabiendas de que es una opción religiosa personal (y el Estado es aconfesional), que además impone un papel social subordinado a las mujeres y determina creencias restrictivas en materia de sexualidad y reproducción.

Con la LOMCE desaparecen asignaturas con el objetivo educativo de la igualdad entre mujeres y hombres, el respeto a la orientación sexual y a la diversidad afectivo-sexual. Se fomentan los centros educativos privados que segregan a su alumnado en función del sexo, en detrimento de la enseñanza pública. Recorta en recursos docentes, lo que implica la pérdida de calidad de la enseñanza pública, fomentando la enseñanza privada, a la vez que contribuye a que se privaticen servicios escolares de comedor y limpieza.

Porque la LOMCE ha eliminado o recortado procedimientos, recursos y servicios  públicos docentes ya existentes (como horas de tutorías, de apoyo escolar, comedores, financiación, infraestructuras de integración, infantiles, etc.), que ha supuesto una triple pérdida en términos educativos, laborales y sociales: por pérdida directa de más de 60 mil empleos (con especial repercusión para el empleo de las mujeres, dada la feminización del sector, especialmente en los tramos educativos de menores edades), con grave retroceso en educación Infantil (0-3 años) y en educación especial, con lo que dificulta las necesidades de conciliación de mujeres y hombres, aumentando de hecho la carga de trabajo de cuidados para las mujeres, lo que a añade obstáculos para su acceso al empleo.

Si queremos edificar una sociedad con igualdad entre mujeres y hombres y en la lucha contra la discriminación y la violencia de género, la educación en igualdad y el respeto a la diversidad resulta fundamental. Ni la comunidad educativa ni la sociedad pueden quedar al margen en este ataque sin precedentes a la escuela pública, laica y gratuita, a la igualdad social y a la igualdad entre mujeres y hombres. Apoyaremos todas las acciones de movilización que desde la Federación de Enseñanza de CCOO se convoquen para parar este retroceso, que nos mete en el túnel del tiempo: